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8 julio, 2025
Yerko Andrés Arce Alvial creció en una comunidad en las afueras de Santiago, marcada por el desempleo, el consumo de drogas y un sistema educativo precario. En ese entorno, la delincuencia no era la excepción, sino la norma. “Creía que, por vivir en este lugar, las cosas tenían que ser así”, recuerda. A falta de otras oportunidades, Yerko se involucró en la única realidad que conocía. A los 16 años, fue enviado por primera vez, a un centro de detención juvenil.
Una realidad que se repite cada vez más en Chile, donde el avance del narcotráfico en diversas comunidades ha generado nuevos desafíos sociales, especialmente para los jóvenes. Muchos de ellos, tras cumplir condena, regresan a entornos sin redes de apoyo ni oportunidades reales, lo que aumenta el riesgo de reincidencia. Según los datos más recientes, cerca del 35% de los jóvenes infractores reinciden en el primer año, y el 46,4% lo hacen dentro de los dos años posteriores a su liberación.
Arce pudo haber sido parte de esas estadísticas, pero eligió otro camino. Gracias a un programa de la Fundación Reinventarse, logró desafiar las probabilidades y construir una nueva historia.
Invertir en vidas transformadas
Fundación Reinventarse, la organización sin fines de lucro de Grupo Komatsu Cummins, acompaña a personas que infringieron la ley, en su camino hacia la reinserción laboral y una nueva vida. Para ello, implementa diversos programas de capacitación y servicios de apoyo en todo el país. Desde su creación en 2011 hasta 2024, la fundación —cuyo nombre refleja su propósito de “reinventarse”— ha apoyado a más de 3.500 personas en su búsqueda de un nuevo comienzo, con más participantes cada año.
“En Komatsu Cummins Chile estamos convencidos de que nuestro principal capital son las personas, junto con el valioso mosaico de habilidades y conocimientos que cada una aporta”, señaló Darko Louit, CEO de Grupo Komatsu Cummins y presidente del directorio de Fundación Reinventarse. “Esta visión es plenamente compartida por la Fundación.”
Para Arce, quien cumplía una condena de 24 meses cuando conoció la fundación, esta representaba “algo que parecía impensable en mi infancia y adolescencia”: una nueva forma de imaginar su futuro.
La fundación impartía un curso de mecánica básica certificada dentro del centro de detención, y Arce decidió inscribirse. Allí aprendió sobre componentes eléctricos, hidráulica y protocolos de seguridad, mientras recibía orientación en habilidades para la vida y apoyo en la toma de decisiones personales. Para un joven que creció con padres ausentes y rodeado de conductas delictivas, fue una experiencia profundamente transformadora. “Me permitió reconocer mis habilidades y fortalezas, y trabajar en mis debilidades para que no me llevaran nuevamente a la posibilidad de reincidir”, reflexiona.
Desde la Fundación, el equipo destaca que las habilidades blandas y el autoconocimiento son tan fundamentales como las competencias técnicas para ofrecer una alternativa sostenible a la actividad delictiva. Ya sean adolescentes o adultos, muchas de las personas que participan en sus programas tienen historias marcadas por el aislamiento social, la marginación, el abuso físico o emocional, una educación deficiente o problemas de salud mental. En muchos casos, el vínculo con la delincuencia comenzó a una edad temprana.
“Establecer una conexión puede ser desafiante. Implica comprender sus historias de vida y equilibrar la autoridad de mi rol con la empatía y el apoyo que necesitan”, comenta Kathya Domínguez, Coordinadora Técnica y Asesora Laboral que trabaja con personas privadas de libertad. “Es fundamental ayudarles a reconocer que, aunque hayan cometido errores, tienen la capacidad de cambiar.”
“Conectar con los participantes puede ser un desafío. Requiere comprender sus historias de vida y encontrar el equilibrio entre la autoridad que implica mi rol y la empatía que necesitan”, explica Kathya Domínguez, Coordinadora Técnica y Asesora Laboral en centros penitenciarios. “Es clave ayudarles a entender que, aunque hayan cometido errores, tienen la capacidad de transformar su realidad.”
Arce lo expresó así: “Una de las formas en que Reinventarse transforma vidas es al reconocer a cada persona, ante todo, como un ser humano.”
Ocupando empleos, construyendo comunidades
Fundación Reinventarse trabaja para romper el ciclo de encarcelamiento, ofreciendo a personas privadas de libertad una oportunidad real de reinserción laboral y social. Su misión conecta con comunidades enteras, al vincular a quienes buscan una segunda oportunidad con empleos que requieren ser ocupados, familias que necesitan apoyo y sueños que merecen ser alcanzados.
En un contexto de escasez de mano de obra en Chile, especialmente en sectores como la minería, donde se proyecta una demanda de 34.000 nuevos trabajadores al año 2032 según el Consejo de Competencias Mineras, la Fundación diseña sus programas de capacitación en línea con las necesidades reales del mercado laboral.
Actualmente, opera 10 programas: siete en centros juveniles y femeninos, uno para jóvenes con permiso de salida laboral, y dos a nivel nacional enfocados en formación e inserción laboral. Las áreas de capacitación incluyen gastronomía, mecánica, peluquería, automotriz, remanufactura y atención al cliente, incluyendo oportunidades en centros de llamadas.
Muchas necesidades, muchos socios colaborando
Llevar adelante la misión de Fundación Reinventarse requiere una red sólida de programas de capacitación y apoyo en todo Chile. La fundación trabaja en estrecha colaboración con el Servicio Nacional de Menores (SENAME) y Gendarmería de Chile, adaptándose a los protocolos y dinámicas de cada centro penitenciario.
Pía Ruíz de Gamboa González, Teniente Coronel en un centro femenino, destacó que el trabajo de la fundación es “altamente valorado por la dirección del establecimiento”, resaltando la buena coordinación y comunicación.
Más allá de los recintos penitenciarios, la fundación también impulsa investigación y promueve políticas públicas que favorecen la reinserción. “Fundación Reinventarse es hoy una entidad líder en Chile en reinserción social y laboral, y una contribución extraordinaria desde la perspectiva de política pública”, señaló Darko Louit, CEO de Komatsu Cummins y presidente del directorio de la fundación.
Al salir de prisión, los participantes cuentan con el respaldo de una alianza público-privada que ofrece apoyo en educación, habilidades parentales, orientación vocacional, mentoría y preparación laboral. Para avanzar en este desafío, Louit subraya la importancia de contar con actores comprometidos y alianzas estratégicas sostenidas.
Komatsu Cummins es un socio clave en cada etapa del proceso. Cinco de sus ejecutivos forman parte del directorio de la fundación, y sus empleados colaboran como instructores y mentores. Además, la empresa aporta instalaciones, equipos y servicios de apoyo. Como muestra de su compromiso, ofrece 10 pasantías anuales a participantes de la fundación, con posibilidad de empleo a tiempo completo. Hasta la fecha, 42 personas han sido contratadas.
En 2023, Arce se convirtió en uno de ellos.
Una experiencia “extraordinaria”
Tras ser liberado dos meses antes de lo previsto, Arce mantuvo el vínculo con Fundación Reinventarse. Completó una capacitación como contador auditor y realizó una pasantía en el área de finanzas de Komatsu Cummins Chile, donde luego fue contratado. “Desde entonces, mi experiencia ha sido extraordinaria”, comenta.
Su curiosidad lo llevó incluso a participar en la Liga de Fantasía de Fórmula Uno de la empresa, donde obtuvo el segundo lugar. “Me inscribí como un fan inexperto, con ganas de aprender y explorar un mundo nuevo.”
Hoy, con 24 años, Arce atribuye su reinserción al apoyo constante de la fundación. “Reinventarse puede generar un cambio real en las personas, como lo hizo conmigo. No conozco otra organización que haga este tipo de trabajo.”
Al proyectarse cinco años hacia el futuro, sueña con viajar, aprender otro idioma y crecer profesionalmente. “Dicen que soñar es gratis. Con perseverancia, motivación y ganas de superarse, me veo liderando un equipo. Y sinceramente, me gustaría que fuera en Komatsu Cummins.”

Yerko Andrés Arce Alvial reconoce a Fundación Reinventarse como un pilar fundamental en su camino hacia el empleo en Komatsu Cummins Chile, en Santiago. “La confianza que depositaron en mí, junto con el apoyo, la orientación y el afecto que recibí… tengo mucho que agradecer”, afirma.

Yerko Andrés Arce Alvial en su estación de trabajo en la oficina central de Komatsu Cummins Chile, en Santiago. Gracias al apoyo de Fundación Reinventarse, obtuvo una pasantía que luego se transformó en un empleo estable a tiempo completo.

Yerko Andrés Arce Alvial conversa con colegas en la sede central de Komatsu Cummins Chile, en Santiago. “La Fundación Reinventarse puede generar un cambio en las personas, como lo hizo conmigo.”